El farmacéutico pide que lo voten en CABA para impulsar una nueva Ley de Medicamentos que reemplace la vigente desde 1964. Va con todo contra la “mafia” cartelizada de los laboratorios y los periodistas ensobrados. Del fentanilo mortal a las coimas del 3% para Karina que denunció Spagnuolo. Cómo los laboratorios “pusieron” al ministro Lugones en Salud y a la directora de la ANMAT.

Por: Martín Cabrales.
Visión Liberal: El escándalo Espert y su posible vinculación con el acusado de narco “Fred” Machado sirven para tapar otro escándalo, el del sistema de coimas y retornos que involucran como eje a la droguería Suizo Argentina. ¿Cuánto hace que en el ambiente de los laboratorios se “habla” de este tema?
Marcelo Peretta: Nosotros hace 15 años que venimos denunciando a la droguería Suizo Argentina y a los laboratorios asociados, que son más de veinte y que además son los más poderosos del país. Los denunciamos por esta asociación ilícita que tenían la droguería y estos veinte laboratorios con el gobierno de Mauricio Macri, al que estuvieron muy fuertemente vinculados, y ahora están totalmente asociados al gobierno de Milei.
Había grupos de droguerías y laboratorios con determinados gobiernos (primero Macri y después el de Milei) y otro grupo de droguerías y laboratorios vinculados con el kirchnerismo, como es el caso de HLB Pharma. Para nosotros esto no es novedad, esto tenía que pasar porque tanto abuso durante tantos años tenía que llegar a la Justicia, porque son delincuentes que toman los presupuestos del Estado, venden con sobreprecios para enriquecerse, dejan parte (los retornos) a la política y la gente no tiene cobertura en medicamentos del PAMI, o no tiene medicamentos para discapacidad, o en las obras sociales. Esta es otra parte de la trama, ya que intervinieron obras sociales para dejarles servido el negocio a estos laboratorios. Y además están las empresas que aprobaron y autorizaron “ad hoc” para quedarse con los recursos del Estado. Ojalá tomemos la oportunidad para crear una nueva Ley de Medicamentos, que es lo que yo estoy proponiendo y por eso quiero llegar al Congreso.
VL: ¿De cuándo es esta ley de medicamentos que tenemos actualmente?
MP: Es del año 1964. Tiene 60 años, y obviamente, es la que permite y deja las ventanas abiertas y los espacios abiertos para estos delitos. En esa época, por ejemplo, las compañías farmacéuticas no podían cotizar en Bolsa, no publicaban tanta publicidad en la televisión y en los medios masivos de comunicación, no había tanto medicamento de venta libre, todos eran de venta recetado, se respetaba el circuito laboratorio-droguería-farmacia-médico-farmacéutico.
Pero hoy -sesenta años después – todo eso cambió, porque vos tenés gran parte de los medicamentos que salen publicitados en los medios masivos de comunicación, tenés médicos o profesionales de la salud o influencers que venden estos medicamentos a través de auspicios, a través de recomendaciones, a través de PNT, que es la publicidad no tradicional, y la gente va y masivamente los compra.
Eso no estaba cuando se sancionó la ley, por eso ahí hay que hacer nuevas regulaciones. Hay que hacer regulación en cuanto a limitar, o yo diría prohibir directamente el financiamiento por parte de los laboratorios a los partidos políticos.

VL: ¿Muy drástico?
MP: Analicemos los dos casos paradigmáticos. Cuando HLB Pharma y otras droguerías financiaban al kirchnerismo, se aseguraban de que no los controlaban, entonces podían hacer lo que hicieron. Ahora se descubrió que son 100 muertes o más por el caso fentanilo. Pero atención, porque nosotros creemos que van a haber más de 400 muertes cuando se termine de investigar todo el expediente.
Por algo le pidieron al juez Kreplak que no dé la cifra de fallecidos todos los días, como en la pandemia, porque eso provoca pánico. Veamos hasta donde llegan las consecuencias de permitir que los laboratorios financien a la política.
Y por el lado del mileísmo, tenemos que la droguería Suizo Argentina se convirtió, no sólo en aportante a la campaña, sino en recaudadora de la campaña. Jonathan Kovalivker, el hijo mayor del dueño de la droguería (Eduardo Kovalikker), fue el recaudador de la campaña presidencial de Javier Milei. Era una persona autorizada por el partido de gobierno para recaudar plata. Estos son los disparates que pasan en la Argentina en función de la desesperación que hay desde la política de llegar al gobierno, de llegar al Estado, de ganar una gobernación o una presidencia en este caso, para hacer dinero y no para solucionar los problemas de la gente.
Ojalá que el Congreso actúe sancionando una nueva Ley de Medicamentos y así prohibir el vínculo de los laboratorios con los partidos políticos o el financiamiento, y regular la publicidad. Ante tanta publicidad, la gente gasta lo que no tiene y consume lo que no necesita, que en materia de medicamento es riesgoso porque después, si un medicamento te hace mal ¿a quién vas y le reclamás? Después el Estado inclusive se tiene que hacer cargo, o las obras sociales y prepagas se tienen que hacer cargo del sistema de cobertura de esas consecuencias.
Hay que hacer una política integral de educación al consumidor de medicamentos y frenar el narcotráfico. No solamente porque hay una especie de desesperación por ganar licitaciones y hacer negocios con el Estado, sino que por debajo se le abren las puertas al narcotráfico.

VL: ¿Podes explicar mejor el vínculo directo?
MP: Porque muchos de los componentes para hacer medicamentos son los mismos que se utilizan para hacer las drogas de diseño. Entonces los narcos se acercan a los laboratorios para pedirles -y pagarles- para que le hagan el servicio de “compresión”, que les mezclen las fórmulas, que le hagan las fórmulas que ellos necesitan para vender como droga de abuso. Y lamentablemente, tengo que decirlo, hay laboratorios que acceden a eso y se dejan financiar. HLB Pharma era uno de esos.
A Ariel García Furfaro nunca se le debió permitir ser dueño de un laboratorio, porque no tiene ni las condiciones empresariales ni las condiciones éticas para ser propietario. Vos cuando sos un dueño de un laboratorio tenés que estar en tus cabales y tenés que saber que lo que vos producís puede sanar gente y salvar vidas indudablemente, pero también puede ser materia de adicción, de muerte, de narcotráfico. Y eso los antiguos farmacéuticos, que eran los dueños de estos laboratorios, lo sabían y lo respetaban. Lo que pasa es que se murieron, los hijos vendieron esos laboratorios porque no les interesó seguir con la actividad del padre, y no tomaron la precaución de vendérselo a gente digna, que respete la ley y la ética, sino que se lo vendieron a sinvergüenzas que solamente quieren hacer negocios.
VL: ¿Los Kovalivker entran en esta última categoría también?
MP: Obviamente. El abuelo de los Kovalivker era el farmacéutico creador de esa droguería que tiene más de cien años, pero a los nietos obviamente no les importó la ética profesional, les importó el vínculo con la política y hacer negocios. O sea, estafar. Cuando vos vendés más caro de lo que es tu precio para guardar una parte para la política, estás estafando. Yo he participado de reuniones donde los Kovalivker se jactaban de tener estos vínculos con los gobiernos. Y hablo en plural porque lo que digo vale para el anterior de Macri y para éste de Milei.
Ojalá que ahora la Justicia avance, se determine la veracidad de estos audios, que avance con la responsabilidad de estos empresarios, que verifique si hubo o no sobreprecios, si hubo o no coimas, porque esto no puede volver a pasar.
Es una locura que en un país tan pobre como la Argentina pasen este tipo de cosas y la gente en el medio no llegue a fin de mes o vaya a su prestador y no reciba el medicamento porque no le dan la cobertura. Sea discapacitado, sea jubilado, o sea afiliado a una determinada obra social. Y todo porque buena parte de ese dinero se “gastó” en estos negociados.

VL: ¿Sos optimista en el rol que tendrá la Justicia en estos casos?
MP: Ojalá, ojalá, porque también los jueces son susceptibles al dinero. O presionables. Y este es el poder real. El poder de los laboratorios, estamos hablando, es el poder real. No es un poder circunstancial o no estamos hablando de una empresa que tiene mucha plata. Estamos hablando de una empresa asociada a laboratorios que tienen muchísimos recursos, pero también muchísimos contactos y que están en condiciones de utilizar la presión sobre los jueces y fiscales.
A veces son los magistrados que presionan a un determinado acusado o a una determinada persona que tiene que dar explicaciones en la Justicia, pero muchas veces se invierte la carga y son ellos (los empresarios corruptos) con los contactos que tienen los que terminan apretando. Y otro tema muy importante: el rol del periodismo. Los medios están fuertemente cooptados por la industria farmacéutica. Esto no es de ahora. Hace quince años que nosotros también venimos denunciando estas irregularidades.
Nos acostumbramos a ver la publicidad abrumadora de los laboratorios en los medios de comunicación, Y también a ver a algunos periodistas que hablan a favor de muchos laboratorios o que tienen en su sponsoreo a esos mismos laboratorios, pero no los blanquean como conflicto de interés, como los obligan en otros países. No, no, en la Argentina no dicen nada, se hacen los boludos y siguen avanzando.
Espero que no pase lo mismo que en el 2007 lo que pasó con la mafia del triple crimen y la efedrina. O con el escándalo de las obras sociales que estaban vinculadas en las estafas, con los troqueles truchos que se falsificaban para cobrar los reintegros. O con los medicamentos vencidos para pacientes oncológicos que se rellenaban con cualquier cosa, ya que que de todos modos, como si iban a morir y entonces les daban cualquier cosa.
Eso pasó en la Argentina y la política no hizo una nueva Ley de Medicamentos. Espero que en esta oportunidad pongamos en el Congreso a los legisladores que están en condiciones de promover una nueva legislación. Y yo me siento preparado para eso.

VL: ¿Cómo vas a hacer, no solo para convencer a la gente que te vote, sino para armar una red con tus colegas políticos, para avanzar con estos temas?
MP: Mi esperanza es convencerlos de que salgan del lado de los malos, del lado de los laboratorios que los sponsorean. Porque cuando vos tomás desde la derecha dura hasta la izquierda más recalcitrante, todos tienen sponsoreo de los laboratorios.
¿Cómo nos damos cuenta? Porque no legislan en favor de la gente. Legislan en favor de los laboratorios. En la pandemia del Covid-19 se “mataban” para generar más y más negocios para los laboratorios, no para cuidar a la gente.
Se “mataban” para comprar vacunas experimentales, para comprar barbijos, o productos supuestamente protectores, y gastar lo que no se tenía, porque los vendedores eran estos laboratorios. Estaban defendiendo a sus sponsors, a sus patrocinadores. Yo espero convencerlos que esto, como todo imperio, tiene un desarrollo, un crecimiento, un sobre-crecimiento y después decrece, después implosiona. Todos los imperios tuvieron ese ciclo, y el imperio farmacéutico, no sé si en esta oportunidad, pero va a implosionar porque con estas prácticas no se puede seguir vendiendo y produciendo un insumo tan esencial para la vida pero de una manera tan corrupta, tan claramente corrupta.
Miremos lo que pasó con el ANMAT. Le allanaron el domicilio a la directora, la doctora Nélida Bisio, porque se habría llevado expedientes de estos laboratorios para protegerlos, para proteger a sus clientes, entre comillas, o digamos, sus amigos. En los últimos 15 días cerraron cuatro laboratorios, además de HLB Pharma y Droguería Suizo Argentina. Ahora sí, el ANMAT, ahora está cerrando todo, clausura todo por la dudas. ¿Por qué? Porque se descubrió, y el juez Kreplak lo descubrió, y ya todo el sector ya lo venía advirtiendo hace tiempo, que el ANMAT, en lugar de estar del lado de la gente, estaba del lado de estos laboratorios.
VL: ¿Cómo funcionaba ese sistema corrupto?
MP: La ANMAT trabajaba para ellos. Les aprobaba los expedientes que ellos pedían, les frenaba la competencia, o sea, no les aprobaba los expedientes de la competencia para que jueguen solos. No los multaba cuando tenía que multarlos o sucesionarlos. Eso pasó, y eso hoy se está descubriendo. En esta nueva ley yo quiero un ANMAT como es la FDA de los Estados Unidos. El director de la FDA da conferencia de prensa cuando hay un conflicto público con medicamentos, el presidente de la FDA convoca a la prensa y dice ¿Qué está pasando con este medicamento? Y les explico. ¿Pasa esto? ¿Se produjo bien? ¿Se produjo mal? ¿Está aprobado? ¿No está aprobado? ¿Tal efecto?
Acá no porque responden a intereses políticos e intereses farmacéuticos. Entonces se ocultan porque los laboratorios ponen estos directores. Por la plata que ellos ponen para la campaña los colocan en esos cargos. El ministro Lugones está puesto por ellos. Bisio, la directora del ANMAT, está puesta por ellos. Negocio asegurado. Ponen gente de ellos. Pero eso pasa con todos los políticos. Ninguno le pone freno.
Los laboratorios les dicen a los políticos: “yo pongo tanta plata, pero mi nombre para el Ministerio de Salud es este, mi nombre para el titular del ANMAT es este, mi nombre para el director del PAMI es este”. O sea, compran los cargos. Y la política, en lugar de rechazar eso, se creen más vivos y después terminan presos. Como Bolsonaro ahora, como le puede pasar también a Javier Milei, si no llega a reencaminar su gobierno.
Esto todo termina en la Justicia.
Entonces vos podés abusar, hacerte el canchero, quedarte con una platita de $LIBRA, quedate con el 8% de los laboratorios, pero llega un momento que te descubren. Y además, si esa plata implicó una consecuencia negativa, la Justicia llega.

VL: Parecería que hoy la presión de la gente puede desnudar el sistema corrupto de los laboratorios…
MP: Ojalá que “algo” o “mucho” cambie. Por ahora son muy pocos los periodistas o los medios que se animan a hablar del tema. Así vemos que hay muchos periodistas que se la pasan hablando de Trump, de lo mal que está la economía, del ministro Caputo, del presidente Milei, del triple crimen de las chicas, de los narcos de la villa 1-11-14 o de lo que el Gordo Dan le dijo a Luis Juez. Hablan de todo, pero no hablan de los laboratorios.
Cuando, por ejemplo, el periodismo en su conjunto debería ayudar a que el Estado garantice que el fentanilo que te van a aplicar en cualquier hospital público o privado del país, no te va a matar.
Y volviendo a la Justicia, los jueces Casanello y Krepak (hablo de estos dos porque son los casos más resonantes) tienen que pensar en los 45 millones de habitantes perjudicados por estos laboratorios. Y ya que el gobierno no reacciona frente a esto – lo que es tremendo -, ojalá que los jueces quieran tomar esto en serio y no solamente investigar y condenar a los culpables, sino empezar a tomar medidas para que esto se termine.
Esto es realmente grande, por eso se soluciona con una nueva ley y tomemos la oportunidad de esta campaña hasta el 26 de octubre para hablar de estos temas con el fin de solucionarlos y elijamos gente, candidatos a diputados y a senadores que se atrevan a enfrentar estas corporaciones.
VL: ¿Te están bloqueando los laboratorios? ¿Te están bloqueando en la tele?
MP: Sí, sí, por supuesto. Totalmente. Un sólo ejemplo, Eduardo Feinmann, se ocupa personalmente de difamarme en sus programas. ¿Por qué? Porque está recontra bancado por los laboratorios. Después que yo fui a la puerta de Radio Rivadavia a pedirle derecho a réplica, obviamente, dieron la orden a todos los programas de televisión de no invitarme directamente.
Porque yo, justamente, quiero terminar con ese negocio entre los laboratorios y los malos periodistas. Entre los laboratorios y los malos políticos. Entonces, un diputado como yo en el Congreso de la Nación es un peligro, obviamente es un peligro para los intereses corporativos de estos malos laboratorios. Por eso me ponen en una lista negra.
Quiero llegar al Congreso para hacer lo que nunca hizo Milei, que vendió sus principios. Milei llegó y se entregó a la timba, se convirtió en Cositorto. El “gran economista” que venía a salvar la Argentina se convirtió en un timbero.