El Partido por la Libertad (PVV), liderado por Geert Wilders, ha abandonado la coalición gobernante en Países Bajos debido a profundas discrepancias en la política migratoria, tras presentar un controvertido plan de asilo sin consenso. La ruptura, anunciada por Wilders en X, deja al Gobierno de Dick Schoof sin mayoría en la Cámara Baja, aumentando la probabilidad de elecciones anticipadas y generando críticas de sus exsocios, que acusan al líder ultra de priorizar sus intereses políticos en un momento de incertidumbre.
La coalición de Gobierno en Países Bajos ha saltado por los aires este martes tras la salida del partido de extrema derecha Partido por la Libertad (PVV), liderado por Geert Wilders. La sorpresiva maniobra sucede después de que la formación registrase un bajón en las últimas encuestas. Según ha explicado el político ultra, el motivo habría sido el desacuerdo en la política migratoria con sus socios de coalición.
Las tensiones en el gobierno comenzaron cuando la formación de Wilders presentó, sin consultar antes a los otros tres partidos de la coalición (VVD, NSC y el BBB), un estricto plan de asilo de 10 puntos. Entre las medidas propuestas planteó cerrar las fronteras y el despliegue del Ejército para su control, rechazar todas las solicitudes de asilo en los puntos de entrada, expulsar de manera inmediata de los refugiados sirios con visa temporal y la suspensión de la reagrupación familiar de los refugiados reconocidos.
Estancadas las conversaciones, Wilders lanzó la semana pasada un ultimátum a sus socios: o cerrar las fronteras o “arriesgarse a que la coalición fracasara”. Y así ha sido: “Ninguna firma para nuestros planes de asilo. Ningún cambio en el acuerdo marco. El PVV abandona la coalición”, ha publicado Wilders en un mensaje en X el martes por la mañana. El partido ultra es la primera formación de la Cámara Baja, con 37 escaños.
Por su parte, la presidenta del partido popular neerlandés (VVD) ha acusado a Wilders de “abandonar” a los Países Bajos ” y de “anteponer sus propios intereses a los de nuestro país en un momento de incertidumbre sin precedentes”. “No se trataba de migración. Ya estábamos haciendo todo lo posible. Todo lo que ya habíamos acordado se retrasó por las chapuzas del PVV. No hubo bloqueo para más medidas positivas. Palabras fuertes, ninguna acción”.
Ahora el Gobierno de Dick Schoof ha perdido la mayoría en la Cámara, lo que hace más que probable un adelanto electoral en el país. La líder del BBB, Caroline van der Plas, ha mostrado su enfado en un comunicado en X: “Quien se rinda ahora está entregando Holanda a la izquierda en bandeja de plata […]. No se gobierna un país a través de Twitter”, ha criticado. Según informa el medio neerlandés NOS, el gabinete se reunirá esta tarde a las 13:30 CET para debatir los próximos pasos tras la maniobra de Wilders.
