Las balas de la guerra en Ucrania pican cerca del campo y la economía argentina. Como un eco indeseable de las pérdidas que genera un conflicto bélico, el invierno se avecina duro, difícil y con pocos recursos para enfrentarlo. Como decía el ingeniero: “hay que pasar el invierno”, sí, pero ¿cómo?
El productor agropecuario Enrique Duhau y los historiadores Ricardo López Gottig y Alejandro Gómez dieron algunas precisiones en Informe Económico, el ciclo radial que conduce todos los jueves Roberto Cachanosky por Radio Cultura.
Tras una descripción del comportamiento del precio de los granos en el juego del mercado internacional, Duhau trazó un gráfico preciso de cómo la compra de soja en 2021, la seca de Brasil, Argentina y Estados Unidos y -este año- la guerra en Ucrania hizo saltar el precio de los granos.
Ahora, se mezclan otras causas: “No hay gasoil, no se consigue. Argentina importa gasoil y gas cuando en Vaca Muerta sobra gas. Pero, ¿y entonces? ¿cuál es el problema? No hay tubos para transportar ese gas al resto del país. Entonces, ni para calefaccionar hogares, ni para uso industrial ni para generación eléctrica alcanza el gas”, explica Duhau.
La crítica situación se completa con el dato de que los europeos “están comprando todo”.
Sí, un invierno complicado aparece en el horizonte. Ricardo López Göttig aporta su mirada geopolítica. “Cuando Putin pensó en invadir Ucrania pensó que sería algo rápido. También pensó que la OTAN no iba a actuar pero lo hace enviando armas a Ucrania. La indisciplina y los saqueos de los propios rusos terminaron por complicar a Putin“
Es tan central la importancia de la energía que “Europa se está preparando para la independencia energética para no depender más de Rusia y hay una revalorización de la energía nuclear, de hecho Francia está inaugurando centrales”, sumó López Göttig.
Pero no todos los misiles deben apuntar a la guerra para explicar la crisis energética de la Argentina. En eso, Alejandro Gómez fue enfático: “”nosotros veníamos pésimamente antes de la guerra. La guerra es una coartada para explicar por qué estamos tan mal”
“Se tiene la idea de que el campo produce solo y atrás de eso hay tecnología, maquinarias, insumos que se deben importar y que el gobierno hace todo lo posible para evitar que suceda”.
Gómez dice que en la década del ’30, durante la II Guerra, el país estaba en mejores condiciones que el presente. “La guerra puede ser una oportunidad, podemos producir, exportar más. Pero -ironiza-parece que el gobierno quiere hacer todo lo que hasta no le conviene a ellos mismos. Ven que el precio sube y quieren cobrar más. No piensan”.