06/11/2025

Ganó Milei y perdió el espanto

En unas elecciones marcadas por abstención récord y campañas primitivas, el oficialismo se impuso por 40% a 25%, pero sin cambios legislativos reales ni plan económico. Con reservas negativas, 80% sin llegar a fin de mes y Trump como salvavidas, el país respalda el giro liberal… mientras la mecha se acorta y Cristina festeja en la sombra. Escribe Nazareno Etchepare.

El sistema representativo republicano que hemos abrazado está pensado para sostener a nuestros gobernantes en el poder y evitar los bruscos vaivenes de la coyuntura diaria. No importa si nos gobierna un inútil, nuestro orden institucional está pensado para evitar cambios bruscos y remover autoridades en un proceso lo menos dramático posible.

El caso de Javier Milei se enmarca en una mezcla de hartazgo social y un grupo empresario y político que ubicaron al libertario como única opción de una generación que debía despedirse de la gestión pública.

Luego de jugar prácticamente dos años a los autitos chocadores, llegamos a las elecciones intermedias y el resultado, después de una de las campañas electorales más cavernícolas de la historia reciente, los resultados no sorprendieron a nadie.

Las elecciones medio término

Hemos vivido una nueva jornada electoral y adelanto mi conclusión: creo que el resultado general es bueno para el país. La abstención, verdadera protagonista, fue del 32%, es decir hubo un 68% de participación. Se trata de un máximo histórico desde 1983, donde apenas el 26% de las personas habilitadas para votar, lo hizo por el gobierno. Solo reparemos que en el 2001 ese número fue 75%, es decir que la legitimidad del oficialismo es de una precariedad alarmante.

Muchos desencantados prefirieron quedarse en casa mirando correr a Colapinto en el GP de México y no asistir a votar. La boleta única de papel fue un éxito como era de esperar, dado que hemos esperado mucho tiempo para lograr este verdadero salto de calidad democrática.

Sin embargo, también debemos decir que la gente en general no sabía qué se votaba debido al complejo calendario electoral que hemos vivido, algo que debe ser corregido de forma urgente.

El gobierno se impuso por 40% a 25% a nivel nacional. ¿Qué cambia con este resultado electoral en materia legislativa? La composición de ambas cámaras en esencia no se ha modificado. Si el gobierno no dialoga ni cumple con los compromisos con las provincias no habrá avances normativos y pueden seguir las palizas legislativas. LLA aumentará su número de diputados en el parlamento de 37 a 101, mientras que el número de senadores subirá de 6 a 20. El peronismo puso en juego 45 diputados, los retuvo a todos y el oficialismo avanzó sobre los escaños del PRO y la UCR que finalmente desapareció.

Si los K dejaban que la economía hiciera su trabajo posiblemente hubieran ganado, al menos eso indicaban todas las encuestas apenas arrancada la campaña electoral, pero eligieron un camino súper violento (caso Espert) y asustaron a los moderados. Sumen a esto la interna dentro del oficialismo y la mano del Angel exterminador (Mauricio Macri), quien ayudó fuertemente en la fiscalización, para darnos una foto “PRO” de la victoria.

La imagen del triunfo en PBA ha sido una foto del PRO con Diego Santilli y Cristian Ritondo a la cabeza con Mauricio Macri esta vez movilizando la fiscalización. Lo mismo ocurrió con Patricia Bullrich, que ahora se perfila como candidata a Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.

Solo para reforzar esta idea, Macri afirmó que el PRO tendrá un candidato en las presidenciales de 2027, y como es evidente, si los números le dan, el “gato” va a buscar el segundo tiempo.

La gente, como es evidente, se cansó del kirchnerismo y de las prácticas populistas. Dadas las circunstancias actuales, a Javier Milei solo se le gana su falta de gestión y propia torpeza o simplemente solo puede ganarle “lo nuevo”.

Si este gobierno fracasa, el electorado definitivamente no va a volver al pasado, va a exigir nuevos dirigentes y propuestas. Los que votaron decidieron respaldar el giro hacia el libre mercado y el mundo libre. En efecto, la masacre electoral de los mismos de siempre muestra que aún no entienden que todo ha cambiado.

Por otro lado la estrategia de Cristina Fernández ha funcionado. El peronismo disperso sumó 6%, estos son Florencio Randazzo 2,23%, Santiago Cúneo 1,4%, Alberto Samid 1,27% y Fernando Gray 1,13%. Mientras Axel Kicillof negaba la realidad acusando el golpe, Cristina festejaba en el balcón de su casa.

Entrevistas, campaña y discurso sin rumbo

Durante los días previos a los comicios Javier Milei dio una serie de entrevistas, donde se lo vio bastante perdido ratificando que su domicilio todo este tiempo estuvo fijado en Narnia. Cuando habló con Eduardo Feinmann comenzó contando, cual criatura, la anecdota del fibrón que tomó prestado en el Salón Oval de la Casa Blanca, con el que hizo la dedicatoria del libro que le dejó de regalo al peridista. Luego la cátedra de macro economía fue interrumpida por Feinmann y el presiniño lo calificó de “marxista” por el solo hecho de repreguntar.

Uno de los momento más épicos de la TV este año fue cuando Feinmann le espetó en la cara a Milei “el 80% no llega a fin de mes”, y aquel desencajado como de costumbre respondió “Emitiendo no se arregla. Como quiere que lo arregle? Vamos, dígame”, a lo que el periodista le dijo: “Usted es el especialista en crecimiento con y sin dinero”, con la consecuente jocosa respuesta de Milei que lo corrigió al estilo Homero Simpson diciendo “crecimiento económico”.

Luego conversando con Esteban Trebuq nuestro presiniño sin amor, haciendo un solo de guitarra con su mano izquierda en fa sostenido, algo que explica la utilidad de la carpetita terapéutica dijo que durante su viaje a Washington DC durmió en la habitación de los amigos como Churchill y de Gaull.

La charla con Guillermo Andino no fue diferente a las anteriores, donde nuestro agotado mandatario en relación al acto en el Movistar Arena dijo: “No puedo estar trabajando 24/7, los ensayos con mi banda me permiten aclarar la mente para volver a trabajar con más fuerza”. Desde luego, no hay cuerpo que aguante después de una jornada en la que 1/3 del día laboral es dedicado a postear en X (ex Twiiter). Y “siguió: “Yo tengo que descansar. Los ensayos de la banda me sirven para despejarme. Los argentinos tienen que entender que yo puedo tener una banda de rock en mi tiempo libre. Además sonamos como una banda profesional”.

Cuando este comunicador preguntó: “Hay gente que dice “todo bien, pero no veo la recuperación económica, mi mes termina el día 20”, Javier Milei nuevamente acudió al relato respondiendo “Eso salió de una encuesta trucha, hay 12 millones de pobres menos”. La nota solo sirvió para que el mandatario nos aclarara que “en todo el concierto cometí dos errores nomás”.

Una vez que estábamos a nada de los comicios, el entorno rápido de reflejos no permitió que nuestro mandatario se entrevistara con Luis Majul. Hasta la propia Cristina Pérez justificó que siendo el cumpleaños de Javito no había motivos para asistir al encuentro.

Nos resta decir que la campaña resultó agitada, Javier Milei fue poco bienvenido en cada uno de los lugares que pisó. En efecto, canceló un acto en Tres de Febrero donde habían armado un escenario en la calle y tuvo que huir. Menos de 1.000 personas se acercaron a saludarlo en Tucumán, y Córdoba fue escenario de unos 2000 asistentes.

El cierre de campaña fue otro manicomio, cuando la temperatura era de 25 grados, nuestro presidente nunca de despojó de sus 4 camperas. En un acto hecho para los recontar propios, y en medio de la euforia, Javier Milei nos volvió a mostrar que es nuestro “Mr. Gardiner”.

Quedará en la memoria colectiva el momento en que estando en el escenario comenzó a los gritos a repetir “Subilo a Tronco, Subilo a Tronco”, ya hermana respondiendo “¿Qué querés?”,“Subilo a Tronco, a Tronco”; y ella lejos de apaciguar los ánimos preguntó “¿Kuka tira piedras?, lo cual alimentó un “Aaaaa Troncoooooo”.

Especialista en crecimiento con o sin dinero

El país sigue sin plan económico y por ahora no habrá cambios, porque mientras las cosas funcionen para el ministro Luis Caputo, no hay necesidad de tocar nada. El Tesoro de Los EEUU le garantizó al gobierno, actuando como salvavidas de última instancia, llegar a los comicios con cierta calma. Donald Trump lo anotó como triunfo propio y dio un mensaje para la región.

Cuando en un acto de desesperación, la gestión Milei pidió la visita oficial a Donald Trump, el presidente más importante de la libertad a nivel mundial no logró una reunión en el Salón Oval, apenas le concedieron un almuerzo con todo el gabinete y un fibrón de recuerdo.

Allí el mandatario de Los EEUU dejó en claro que “Si el presidente pierde, no seremos generosos con Argentina”, augurando un desastre tanto para Javito como para los K. En el entorno salieron desesperados a aclarar que el presidente norteamericano se refería al 2027, aunque ya estaba claro que se trataba del 2025. Las caras de Toto Caputo y Santiago Bausili eran por demás elocuentes de los disparates que decía Milei y el poco interés de Trump.

En vísperas de la elección Trump decía a la prensa local “Argentina está luchando por su vida, muchacha. Ustedes no saben nada de eso. A Argentina no lo beneficia en nada. ¿Entiende lo que eso significa? No tienen dinero, no tienen nada. Están luchando tan duro para sobrevivir. Si puedo ayudarlos a sobrevivir en el mundo libre, me agrada el presidente de Argentina. Creo que está tratando de hacer lo mejor que puede. Pero no hagan que suene como si estuvieran haciendo las cosas muy bien. Ellos están muriendo.”

Una vez conocidos los resultado el presidente Trump dijo “Ganamos mucho dinero gracias a esas elecciones”. Los EEUU se habían montado en la bicicleta financiera de Toto y salieron ganando. Durante un par de semanas el programa económico dependía de un tuit diario de Scott Bessent y dinero de los contribuyentes estadounidenses que sostenían el valor del dólar en Argentina. Santiago Bausili, presidente del Banco Central por aquel entonces decía “La situación es muy extrema. Hay una enorme demanda de cobertura. Esperemos que se revierta después del 26 de octubre”.

El riesgo país que venía a todo galope arriba de los 1000 puntos básicos, bajó abruptamente a los 650 y volvió a trepar hasta los 800. El ministro Toto Caputo que en Julio se mostraba provocador con el dólar en $1260, ahora dijo que se siente cómodo con un cambio en $1500. Las reservas netas son negativas en US$ -11.000 millones y están en el mismo nivel que entregó Alberto Fernández. En efecto, las elecciones y la intercesión de Los EEUU no resolvieron no resolvieron el problema de fondo y la mecha de la bomba atómica es cada vez más corta.

El 53% de los hogares declara que no llega a fin de mes y casi el 58% contrajo deudas. Hay encuestas que el primer dato llega al 80%. En julio el empleo asalariado privado bajó -0,1%, mientras que los autónomos retrocedieron por séptimo mes (-0,5%), se trata de un dato récord. Los monotributistas retrocedieron -0,4%, pero los monotributistas sociales, es decir los subididos, crecieron 0,9% mensual, aunque representan apenas el 1,9% de la fuerza laboral.

Desde 2012, el empleo privado registrado creció solo 2,9%, mientras que el empleo público aumentó 33,7% y los monotributistas 64,4%. Para mayor abultamiento, el consumo masivo, léase las compras en supermercados, cayó -7,9% en septiembre respecto a agosto y -6,3% interanual. Desde que asumió Milei todos los meses, de forma constante, se consumen menos alimentos.

Durante casi dos años hemos vivido una novela adolescente con toques de espanto, pero en lo que significa mejoras en la calidad de la vida de la gente, no hubo progresos, sino más bien todo lo contrario.

La tensa calma social producto de la baja cosmética de la inflación y mucha contabilidad creativa para presentar las cuentas públicas, nos acercan a una situación dramática que no registra precedente.

Compartir:

Más publicaciones

El fin de la representación política

El sistema representativo, diseñado para sociedades compactas del siglo XVIII, se adaptó a la era industrial mediante partidos de clase, pero hoy, en un mundo posindustrial multicultural e individualizado, los